11/07/2016
Necesitamos estirar las piernas.
El día de ayer resulto muy agobiante. Todo el día con una incesante lluvia que apenas nos permitió bajarnos del coche.
Con una mejoría dudosa, decidimos acercarnos al sur de la isla y probar suerte con The Fairy Pools.
Al pie de las Black Cuillins, The Fairy Pools es una sucesión de pequeñas cascadas y pozos. Desde el aparcamiento parte un camino que las va recorrido, mientras se aproxima a un estrecho en la montaña por donde desagua el río.
La niebla pegada a las montañas da un aspecto más nórdico, más invernal. Pero esa niebla nos impide ver la magnitud de las propias Black Cuillins, las montañas que atrapan cualquier nube que pase por Escocia.
Hacemos el recorrido, ida y vuelta, y tomamos un bocata en el área de descanso (junto al parking), para luego continuar hacia Loch Brittle, donde a pesar de tener nombre de lago se trata de un fiordo.
En la playa de guijarros, tenemos un encuentro con un grupo de cornejas cenicienta y unos correlimos comunes.
Sentados en la playa, disfrutamos de unos rayos de sol que se han conseguido colarse por el manto de nubes que recubren la isla desde hace... cuanto hace??? Dos días, solo hace dos días que llueve y nos parece que lleva haciéndolo toda la vida.
Nuestras primeras cenicientas las vimos durante nuestro viaje a Cerdeña.
Correlimos comunes.
Gaviota cana.
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