19/07/2016
De nuevo la suerte nos acompaña.
Nos vamos a las Farnes, un grupo de pequeñas islas situadas en el mar del Norte y muy próximas a la costa de Northumberland.
La suerte nos acompaña con un día extraordinario que nos permitirá disfrutar de la visita de dos islas del grupo.
Sin población permanente, las islas son únicamente ocupadas por los voluntarios del National Trust, que son los encargados de gestionar la visitas a la isla.
El trasporte a la isla, un robo. El primer viaje lo realizamos un número de personas que llamaríamos normal. Los siguientes, cambio de isla y vuelta, nos encontramos como sardinas en lata, o en término marineros como "carne de patera". Lo importante no es la seguridad ni la comodidad de los viajeros. Lo que se busca es obtener el máximo beneficio. Para ello, es necesario apretujarse a pesar de que el trayecto sea muy corto y que hayamos pagado por dos adultos y un niño 90 libras.
El desembarco en las islas, más de lo mismo.
El National Trust no mira minimizar el impacto humano sobre las aves. En este caso vemos que lo que prima es rentabilizar la reserva. Dos adultos y un niño por desembarcar en dos islas 80 libras.
Y las islas plagadas de turistas, con dificultades al cruzarse en las pasarelas, y los visitantes que seguían llegando como pateras abordando la costa.
Aún así, disfrutamos de la isla. Disfrutamos de las aves; haciendo miles de fotos, recorriendo los caminos permitidos y disfrutando de un completo día de sol.
El barco se mueve. Tengo prisa por disparar, no se donde enfocar, que grupo....
Decido calmarme, tomármelo con tranquilidad y hacer lo que pueda.
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