30/07/2016
Con los suizos es muy difícil hacer una ruta. Mejor dicho; qué difícil es hacer una ruta con los hijos de los suizos. El camino lo hacen medio corriendo, sin mirar ni a derecha ni a izquierda y nada más llegar al final, ya están quejándose de que tiene hambre. Si es que son como niños!!!
Aún así, el entorno y el propio Berry Head tiene suficiente encanto como para ser un lugar que te permita disfrutar de un atardecer glorioso.
El cabo, la profundidad de su mar, su playa coqueta y encantadora y hasta el restaurante situado en la orilla de la playa, y que tanto agradó al paladar de los suizos.
Pobre adolescente pillado en calzones para la posteridad. Mucho agradecerá que el blog esté cerrado.
Por el bosque
Damos rienda suelta a la locura. A destacar la expresión de Peyruz
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