18/05/2019
Último día por tierras rusas.
Mañana libre para hacer hacer la maleta, comprar las ultimas matrioskas y dar una vuelta por los alrededores del hotel.
Y como remate, de camino al aeropuerto visita de la Catedral de San Nicolás de los Marinos, iglesia ortodoxa de estilo barroco isabelino dedicada a San Nicolás de Bari.
A estas alturas del viaje, San Nicolás resulta otra iglesia más. Apenas nos sorprende su alegre colorido, ni los dorados de su interior.
El viaje a por Moscú y San Petersburgo llega a su fin. Muy breve estancia para un país que se caracteriza por tener el adverbio más en todas sus obras, donde se come todos los días ensaladilla rusa y donde un sol refulgente brilla sin cesar 😅😅😅.
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