4/03/2019
-Ni Liga, ni Copa, ni Champions 😠😠😠😠
-No te preocumes, siempre nos quedará el Fontañán.
El Fontañán es la montaña apropiada para una salida de tarde; cerca de León capital, una distancia moderada, poco desnivel y gran variedad de paisajes durante su recorrido.
Caminos de ribera, bosques de robles, de hayas y hasta de pinos si bajas hacia Nocedo, praderías de altura y sobre todo.... restos de nuestra historia.
"El tiempo presente dura poco y se recuerda aún menos".
Salgo después de comer con intención de disfrutar la tarde por las laderas del Fontañán y para ello me acerco hasta los Barrios de Gordón donde aparco el coche junto al cartel informativo del circuito al Fontañán.
El cielo se ha ido cubriendo durante la mañana de una cortina grisácea que trasmite una languidez continua.
Un sendero balizado, marcado y con un potente rastro nos lleva hacia la cima del Fontañán recorriendo un terreno de lo más variado y que la ausencia de hojas en los árboles nos permite observar con mayor claridad. La blancura del piso de los robledales difiere al ocre del de los hayedos. El bosque aún duerme, mientras en la pradera, algunas flores ya sacan sus hojas a relucir. Con la elevada temperatura de los últimos días, la primavera se huele en el ambiente a pesar del viento fuerte y frío que me sorprende cuando alcanzo la arista.
Altura es sinónimo de vistas. Las que tengo hacia el valle de Gordón, con un Cueto San Mateo muy cercano y unas Marías vistas en la lejanía.
Las cruces del Fontañán se han vestido con banderas multicolores que contrastan con el gris de los puestos de tirador y la casamata próxima a su cumbre.
Voy bien de tiempo, aún resta tarde y tiempo, pero el viento hace que permanecer en la cima sea imposible, a menos que desees sufrir.
Por ello desciendo por la arista norte con intención de volver por el camino que sube desde Nocedo de Gordón. Un recorrido más corto que el que me trajo desde los Barios (pero algo más montañero), que me hará recorrer unos tres kilómetros por el Camino del Salvador para llegar donde esta el coche y cerrar círculo en los Barrios.
Siempre que paro en este lugar me fijo en esta casona impresionante que va deteriorándose con el paso del tiempo.
Cartel informativo al inicio de la ruta y el Cueto San Mateo al fondo.
El robledal se acompaña con unos corros de encinas.
Cueto San Mateo.
El hayedo aparenta estar más desnudo.
El Fontañán. Antes es preciso cruzar esa mancha de hayas.
Una mirada atrás cuando estoy a punto de alcanzar la cima.
Las Tres Marías (Valle de Casares)
Cima del Fontañán.
Los cinco elementos: azul (cielo – espacio), blanco (agua), rojo (fuego), verde (aire y viento), amarillo (tierra).
Las banderas de oración son colocadas en este orden de colores.
Las banderas de oración son colocadas en este orden de colores.
Las oraciones contenidas en las banderas con sagradas, por lo que no pueden colocarse directamente en el suelo.
Banderas de oración (hace poco me encontré con otras en la cima de Peña Valdorria), lápidas funerarias (a escasos metros hay una por una excursionista fallecida en las cercanías, al igual que en el Gilbo están las botas de un montañero muerto, y en Correcillas una chapa por un hombre muerto que le gustaba subir a esa cima), o los montoncitos de piedras que hay en la cueva del San Mateo o en la antecima del Cerro de San Bartolo en la Cepeda. Joer como siga la cosa así, en las cimas estrechas no quedará espacio para ponerse y hacer una foto!!!!
Antecima del Fontañan. Con dos galerías: una que sirve de entrada a la casamata,
Interior de la casamata.
El frente que protegía.
y una segunda de acceso a los puestos de fusileros.
Puestos de fusileros.
Durante el descenso.
Hacia Nocedo de Gordón.
Por un pinar.
Nocedo de Gordón.
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