En el Pozo Cheiroso |
1/09/2017
Parto hacia el Alto Sil, hacia un grupo de montañas con altura relevante en la Cordillera, pero apenas conocidas debido a su lejanía.
Miro de Valdeprado (1.985mts), Peña Boquín (1..986mts), Cornón de Busmori (1.932mts) y el Alto de Bigurdón (1.939mts). Y entre ellas, o mejor, por sus alrededores, las lagunas de Fasgueo y el Pozo Cheiroso.
Un paraje con una profunda huella glaciar como muestran las cubetas donde se asientan sus lagunas y los profundos valles que vierten aguas hacia el Sil.
En los valles, bosques espesos, de robles, abedules, acebos, servales, que van dando paso, según ascendemos, a parajes de montaña, donde solo el brezo y la escoba tienen cabida.
Largo trayecto desde León hasta Páramo del Sil. No es necesario entrar en este pueblo. Sobrepasado, encontramos el cruce que nos lleva al valle de Valdeprado por la carretera privada que servía para trasportar el carbón desde las minas de Cerredo hasta la central térmica de Anllares. Tampoco entraremos en Valdeprado, continuamos hasta las Brañas de Susañe, un pequeño grupo de cabañas que se mimetizan entre la vegetación y que será preciso estar atentos para localizar el pequeño cartel indicador.
Frente a las Brañas de Susane (al otro lado de la carretera) podríamos ver el pequeño circo que engloba las cimas de la Peña Boquín y el Cornón de Busmori, pero esta mañana no veo nada, ya que una espesa niebla aparece amarrada a sus cimas.
Hacia ellas voy, ascendiendo por el valle de Busmor. Una amplia pista da paso a un estrecho sendero que serpentea entre helechos y me lleva hacia un bosque de robles. Y me sorprendo con un rumor que se va acrecentando mientras subo, y que me lleva hasta la base de la cascada de Aguas Blancas (los embalses sin apenas reservas, todo el campo agostado y la cascada de Aguas Blancas conserva el agua).
Salgo del bosque y salgo de la niebla que el potente sol de verano ha conseguido dispersar. La vega de Busmor solo contiene las ruinas de sus brañas. Frente a mí el collado entre Peña Boquín y el Cornón de Busmori aparece próximo.
Mi intención era ascender al Miro desde el Pozo Cheiroso, pero desde la braña decido alcanzar el collado intermedio y alzarme primero sobre la cumbre del Miro de Valdeprado.
Un paisaje de montaña muy montaraz. Linea de cumbres que nos facilita un transito sencillo, si disculpamos algunos altos escobares que cierran el camino.
De nuevo disfruto de los espacios abiertos. La vista no encuentra fondo. Únicamente el viento que barre la arista y me deja literalmente helado pone su nota negativa.
Del Miro desciendo al Pozo Cheiroso y vuelvo a remontar la altura perdida hasta el Miro para pasar hacia Peña Boquín. Una cima más desconocida y menos ascendida que el Miro a pesar de tener un metro más de altura y disponer, a mi juicio, de mejores vistas sobre el valle de Valdeprado y sobre todo el macizo.
No he de volver a pasar por la cima del Miro para ganar la arista. Un "subeybaja" muy relajado y me encumbro en el Cornón de Busmori.
Cercano el Alto del Bigudón, última cima del día, desde cuya cima descubro las lagunas de Fasgueo. Lagunas de menor tamaño que Cheiroso, pero que de momento conservan agua.
Plano de la ruta. |
Un par de kilómetros me separan de las Brañas de Susane. Unos diez o quince minutos a paso descansado, pero me encuentro con un pastor que ha subido a ver a las cabras que tiene por el monte y esos quince minutos se alargan mientras hablamos de osos, de valles y de lobos.
Por el valle de Busmor.
Dejamos la pista por la que entramos al valle y tomamos el pequeño sendero que nos indica el cartel.
Un bosque misto, donde destacan algunos ejemplares de roble.
Un habitad muy apropiado para el oso.
El rumor del agua me lleva a acercarme hasta la cascada de Aguas Blancas.
Como su nombre dice: aguas blancas.
La vega de Busmayor. Entre las cimas de Peña Boquín y Cornón de Busmori.
Hoy muy tomada por las escobas.
Restos de las Brañas de Busmor.
Vista atrás.
Peña Boquín.
A punto de alcanzar el collado entre Peña Boquín y el Cornón de Busmori que vemos en el centro de la foto.
Hacia Ancares.
Otra vista de Peña Boquín y el valle por el que he ascendido.
Cima del Miro de Valdeprado.
Con bastante frío
Escultura de la Virgen de las Nieves. Muy.... románica?
Vista del Pozo Cheiroso desde la cima del Miro.
Desciendo hasta su cubeta.
De buen tamaño, a pesar de ser agosto y tener bastante mermadas sus aguas.
Al igual que el Pozo del Curavacas y otras lagunas que toman el sobrenombre de pozos, su denominación tiene relación con la gran profundidad de su cuba.
Y en todos ellos, cuenta la leyenda que de en esas profundidades hay un túnel que une la laguna con el mar y en días que el mar esta agitado en la laguna........
De nuevo asciendo hacia la cumbre del Miro
Que cruzo sin pararme camino de..
Peña Boquín. La montaña con cumbre más agreste.
Cumbre de Peña Boquín.
Que nos regala buenas vistas del valle Busmor.
Laguna Bermecha.
Una panorámica desde la cima.
Y otra hacia lo que nos queda por recorrer.
Vista atrás. Peña Boquín y el Miro de Valdeprado.
Cima del Cornón de Busmori.
En el blog de mi amigo Victor (Pindio, pindio) aparece esta cima con el nombre de Fana del Coronxo. Es posible que ese sea su verdadero nombre, ya que Victor es un apasionado de la toponimia y se habrá informado correctamente. En mi caso empleo la que aparece en el Iberpix, ya que creo que será la más extendida.
Hacia la ultima altura del día.
Vista atrás, hacia el Cornón de Busmori.
Una primera imagen de las lagunas de Fasgueo.
Desde la cima del Alto del Bigudón.
Laguna superior.
Laguna inferior.
El gran circo de Fasgueo.
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