Caminando por Villalmonte (Valdetuejar)

 

7/02/2021

Al noreste de Otero de Valdetuejar se abre un pequeño valle que finaliza en Villalmonte, el pequeño pueblo que cierra el valle y se esconde tras el alto de El Peralón.

Partimos de Villalmonte, con tiempo incierto, hacia los altos que nos permitan franquear hacia el vecino valle del Cea, en busca de un soto de grandes robles que conocimos años atrás y que hoy vuelven a reclamar nuestra atención.

Paraje plenamente montaraz, donde el roble es el rey y donde algunas explotaciones de pino se intercalan en las laderas más norteñas.

Seguimos descendiendo hasta las praderías de Mental y hasta el arroyo de El Busto, que cruzamos para luego acompañarlo por todo el valle hasta unas nuevas praderías donde se asienta un refugio. 

Y en el camino un nuevo robledal donde algunos ejemplares nos sorprenden por su tamaño.

Desde el refugio, buenas vistas hacia Peña Negra y alrededores por donde caminamos hace unos días.

Un último esfuerzo, una última cuesta y alcanzamos el collado de los Carros, por el que pasamos al valle del Tuejar y en continuo descenso a Villalmonte.



Caminando por las calles de Villalmonte.
Villalmonte y al fondo Peñacorada.
Con más detalle Peñacorada.
Robledal.

Alcanzando la arista las vista se abren hacia la vecina Peñacorada.
Y hacia las Montañas de Ocejo: Campriondo, Los Moros y Peña Rionda.
Del otro lado, el valle de Prioro.
Con más detalle las vertiginosas paredes de Los Moros.
Panorámica.
Los Moros y la Rionda.
Descendiendo por un pinar.

La Cota de Robles.
Situado el los altos del paraje de las Conjas (Morgovejo).


Robles no muy gruesos, pero de gran tamaño.

Continuamos descendiendo hacia el valle de Mental.

Valle del arroyo del Busto.


Valle del arroyo del Busto.
Otra mancha de robledal con grandes ejemplares.



Entrando en las praderías donde se encuentra el refugio.
Refugio.
Con vistas hacia Peña Negra.

Traspuesto el collado de los carros, entramos en el valle de Valdetuejar.
Peñacorada flotando en un mar de robles.





1 comentario:

  1. ¡ Qué guapo ese robledal ! Otro rincón que conocemos gracias a ti, en una zona poco transitada.

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