Camino del reservorio de aves que hay al norte del estuario del Exeter, descubrimos una pradera repleta de barnaclas carinegras. Cientos de carinegras pacen tranquilamente en un campo de golf anexo a la población de Starcross.
Un primer vistazo y Martín descubre un ánsar indio entre un grupo de barnaclas canadienses. A partir de ese momento, cobra mayor interés la observación del "indio".
Visto y fotografiado el "indio", nos centramos en las carinegras, que vimos por primera vez la semana anterior.
Más de cerca, las vemos pequeñas, rechonchas, piquicortas y paticortas. No nos resulta una ave llamativa y vistosa.
Además de las carinegras y el ánsar indio, vemos barnaclas canadienses, ostreros, zarapitos, faisanes y alguna garza real. Y lo más sobresaliente, una barnacla carinegra americana (nigricans) que nos mostro un pajarero inglés, pero que no pudimos fotografiar.
A la vuelta, al final de la tarde, paramos en la misma pradera, pero la gran mayoría de las aves no están. La marea ha descendido y el estuario ofrece mejores posibilidades.
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