18/01/2017
Ayer cuando volvía del monte decidí acercarme hasta la zona donde descubrimos el año pasado un precioso ejemplar de águila blanca, para ver si seguía por la zona.
Allí estaba, en su atalaya, acompañado en esta ocasión por un busardo común.
El que denomino como "águila blanca" es una variante extremadamente pálida de un busardo común (Buteo buteo), que el año pasado descubrimos Martín y yo, cuando pajareábamos una mañana por los alrededores.
Un ejemplar que arrastrado por alguna corriente, termino invernando por el Alto Payuelo.
No añadiré nada sobre este tipo de busardos nórdicos, ya que en su día hice una entrada sobre este tema.
Ya estaba al corriente de su regreso este año, es más otro día al bajar del monte me acerqué y lo vi, pero ayer como no tenía los aperos para poder hacerle una foto, no me acerque para no molestarle y decidí volver esta mañana para intentar hacer una foto curiosa.
Localizo al otro ejemplar de ratonero en una torreta de luz y al nórdico en una chopera próxima. Me acerco muy despacio con el coche por una pista que se aproxima y me doy a la técnica de acercarme un poco y disparar unas fotos. Pero apenas me meto por la pista, el nórdico levanta el vuelo para ir a posarse a otro poste situado al otro lado del pueblo.
Mientras el otro ratonero observa como reculo por la pista sin inmutarse, abandono la zona y entre las calles del pueblo me acerco hasta una calle desde donde puedo verlo. En esta ocasión, para salvar la gran distancia, lo intento con el tele + cámara y emboscado entre una casa y un árbol. Monto todo el tinglado y tiro una foto. Miro la pantalla de la cámara para ver el resultado y cuando vuelvo a mirar al pájaro... YA NO ESTÁ!!!
Y por más que lo busqué por los alrededores, el nordico no apareció.
Se a ciencia cierta, aunque no fui capaz de encontrarlo, que el águila blanca continua por la zona. Sobre todo un día como el de hoy, donde León toma el testigo de la capitalidad gastronómica (Que Dios nos pille confesados!!!!).
Con el tele + cámara
La siguiente fue hecha a principios de noviembre.
Un bicho precioso. Por aquí tenemos uno también muy blanco. Un saludo.
ResponderEliminarHola José.
EliminarNo sabía que tuvierais uno por Zamora. El pajarero que tengo en casa solo me informa de las cosas raras raras.
Saludos José.