Mareando la perdiz: Peña Terrionda, Peña Toya y Pico de la Hoya

18/05/2019
-Tú te inventas los nombres!!!!!

A Toño le sorprenden los nombres de las cumbres con los que le bombardeo, al igual que él lo hace conmigo con los nombres de vías de escalada.

Y es que, en este pacto de mutuo intercambio de actividades, ambos de dos, tenemos la mar de aventurillas que contarnos.

Para nada el día de hoy resulta malo. A pesar de las probabilidades de lluvia, decidimos salir a patear por un entorno donde espesos bosques de hayas, con hoja nueva, dan paso a montañas de escasa altura que te permiten vislumbrar múltiples cimas de las cuencas del Esla y del Porma.

Atrás quedaron Cistierna, Aleje y Crémenes. No llegamos a Las Salas, ya que antes tomamos el desvío que conduce a Lois, al que tampoco accederemos ya que nos quedamos en Ciguera.

Pequeño, coqueto y encajado entre monte y montañas, Ciguera es el inicio de una ruta circular que por una pista que atraviesa un precioso hayedo, que luce hoja nueva, y más tarde por camino y sendero, nos lleva a un collado próximo a Peña Terrionda.

Las nubes quieren robarnos la visión, pero el viento lanza una ofensiva y despeja los bajos, permitiéndonos distinguir cumbres emblemáticas de la cuenca del Esla y de la del Porma.

Un último esfuerzo y nos aupamos en la cumbre de Peña Terrionda, la de menor altura del trío que hoy haremos.

Aristeando, como tanto nos gusta, vamos recorriendo nuestro camino hacia Peña Toya y después hacia el Pico de la Hoya, que nos sorprende con la profunda cuenca donde se encuentra Lois.

-Está nevando!!!!!

Mapa del recorrido

Dejamos la cima y continuamos por la arista del Jaido hasta dar con una vira que nos conduzca a las praderías rodeadas de hayedo que hemos visto desde la cima.

El verde sorprende por la gran variedad de tonos de esta primavera resplandeciente.

Descendemos buscando los mejores pasos hasta que se nos cierra y tenemos que continuar por una torrentera que nos deja a la entrada del pueblo.

-Pues no ha llovido!!!!

Ciguera es como la mayoría de los pueblos donde comenzamos nuestras rutas, final de carretera y se encuentra encastrado en el valle del río Alcón.

Todo el conjunto aparece como dispuesto a pasar revista; calles limpias y casas en perfecto estado.

Rodeado de montes y montañas, pero sin sensación de opresión.

La pista atraviesa un bosque mayormente de hayas.

Hace un rato que la pista ha desaparecido para dar paso a un precioso sendero que recorre el bosque hacia el collado.

Las lluvias de estos días ha dejado el monte resplandeciente.