Mareando la perdiz: Las Pintas

12/04/2015
Las Pintas, la muralla blanca que encuentras cuando te diriges al embalse de Riaño.
Hoy no la vemos. Cuando nos encontramos a la altura de Crémenes y miramos hacia Las Pintas lo único que podemos ver es niebla.

-Despejará?
-Pufff, más nos vale.

José Luis me envía un wasa para ver si podemos hacer algo juntos el domingo. En menos de cinco minutos tenemos definido un plan: Las Pintas.

Con la incertidumbre de si estaremos metidos en la niebla todo el día, partimos de Las Salas hacia la cima. En este caso, nuestro inicio de ruta es un poco diferente. Y esa diferencia, nos lleva hasta una pequeña cascada que se encuentra al este del pueblo.

Incorporados a la ruta oficial, vamos ascendiendo entre charleta animada hasta que nos damos cuenta que sobre nuestras cabezas a venido la luz como una autentica revelación.

Y con la luz, las montañas vecinas y los valles.

Subida tensa, sin descanso hasta alcanzar la arista y la cima este. Una ventana al embalse de Riaño y a las montañas ocultas por este murallón en que nos encontramos: Llerenes, Peña Cabeza, Peña Collada, el Yordas.

Seguimos enumerando cimas hasta que se nos cansa el dedo de tanto apuntar.

Nos queda recorrer la sencilla arista para alcanzar la cima princial, la oeste donde se sitúa el vértice geodésico.

Y en esta volvemos a repetir la operación.

El descenso se nos hace pesado. Han sido mil metros de desnivel y es necesario volver a perderlos. No vemos el momento de quitarnos las botas y tomarnos unas cañas.