2/01/2017
Después de comer nos acercamos hasta el puerto de Santoña.
Se llevan observando, por los alrededores del puerto, varios colimbos grandes y uno ártico.
Comenzamos la busqueda mirando al interior del puerto, a la ría y sobre todo a los movimientos de varios pajareros que buscan al igual que nosotros, y cuyos movimientos delatarán cualquier observación.
Damos con el primer colimbo en la ría. A contraluz resulta difícil la distinción entre grande y ártico, ya que la diferencia de tamaño apenas es significativa.
Lo observamos, hasta que descubrimos otro colimbo en el interior del puerto. Ya más próximo, juega con nosotros al gato y ratón mientras pesca en el interior del puerto, pasando por debajo de los pantalanes, con tal capacidad para aguantar bajo el agua, que no permite saber donde aparecerá.
Y en esas estamos, cuando vemos llegar un grupo de pajareros que nos informan que están siguiendo al ártico.
-SI!!! Mira la diferencia está en la mancha blanca de la popa, cuando flota en el agua.
Ni matices en el pico, en el blanco del pecho, en el tamaño.... la diferencia la marca la mancha blanca en la popa (es decir en el parte de atrás).
En ese momento el colimbo ártico surge bajo nuestros pies a escasos cuatro metros, y se pone a pescar, produciendo la salida de cardumen (concentración grande de peces) que huyen de él. Así lo observamos durante unos minutos, hasta que otro de los colimbos grandes vino a reclamar su parte en el banquete y el ártico se vio abocado a dejar espacio.
Si en e anterior reportaje hacia mención al miedo que sienten las barnaclas de la figura humana, tengo que decir que en el caso de los colimbos que hemos encontrado en Santoña, nos han recordado a aquella tarde de colimbos que tanto disfrutamos en Paignton (para ver el report, pincha en la foto.
Y si de colimbos va el report, no puedo dejar de mencionar (ya sea para comparar o para recordar) al colimbo de Adáms (pincha en la foto).
Las fotos de los colimbos en Santoña en Google+
Puerto de Santoña.
Colimbo grande.
Cormorán grande, gaviota reidora y cormorán monudo.
Zampullín cuellinegro.
Konicoleando con los colimbos.
Colimbo grande.
Colimbo ártico. En esta imagen apenas se distingue la mancha blanca de popa. Pero la hay.
En esta foto sacada a mucha distancia se puede ver muchas de las diferencias entre colimbos grandes y árticos. Pico más afilado, redondez de cabeza, tamaño.... pero la mancha blanca de popa... esa es el matiz diferenciador.
Colimbo ártico. Un ave muy elegante.
Como digo un ave muy elegante, pero mucho más cuando la vemos en plumaje nupcial.
Lo pudimos ver el verano pasado en Lochindorb durante nuestro viaje por Escocia.
Rematamos la tarde por las marismas de Bengoa, cuando la luz pierde fuerza y multitud de aves vuelven a sus dormideros.
En la lejanía Cruz ve tres aves que revolotean y me pregunta que pueden ser.
-Ostras!!! Serretas.
Pero esa es ya otra historia....
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