Ascensión a Torre Blanca y Torre del Hoyo Oscuro
12/08/2006 (Recuperada del baúl de los recuerdos)
Me reúno con Pepe Jaén, Pepe León y Juan José en Boca de Huergano, donde han llegado provenientes de Cardaño de Arriba, donde pasan unos días. Coloco mis cosas en su coche y según tomo asiento y oigo el chirrido de los neumáticos del coche de Pepe Jaen, me doy cuenta que tendría que haber insistido en llevar mi coche.
Largo trayecto desde Boca de Huergano hasta Fuente Dé, a pesar de tomar todas las curvas del San Glorio en plan rally y ligero mareillo, que el vuelo en teleférico se encarga de despejar.
Nada más descender al mirador, me doy cuenta de la majestuosidad del paisaje de Picos que está presente en cualquier rincón de este macizo.
Traemos en mente un recorrido circular por el corazón del Macizo Central. Desde el Cable, por la Vueltona hasta el refugio de Cabaña Verónica y desde este, bordeando Hoyos Sengros, hasta la cumbre de Torre Blanca.
Buenas vistas desde Torre Blanca al grupo del Llamrión, a la barrera montañosa que forman Peña Vieja con el Tesorero y a las Vegas de Liordes junto a sus cimas aledañas, hacia las que ahora nos dirigimos.
Buscando los mejores pasos, seguimos paralelos por las estribaciones del cordal Tiro Llago-Madejuno hasta dar con el trazado que remonta hacia el Tiro Casares, desde donde afrontamos la ascensión a la Torre del Hoyo Oscuro.
Un nuevo balcón, si cabe más formidable, sobre Liordes.
Sin prisa, sin pausa, descendemos hacia la Vega de Liordes, en busca del color del que fuimos privados desde que salimos de la Estación Superior de Fuente Dé.
Por el mes en que nos encontramos, las vegas tendrían que estar apagadas. No lo están las de Liordes, que conservan el verdor de los días primaverales.
El círculo se va cerrando. Por el antiguo camino minero, entramos en los Tornos de Liordes y comenzamos a volar sobre la Liébana, hasta que llegamos al aparcamiento donde hemos dejado esta mañana nuestro coche.
-Una cervecita y pa casa
-OK y llevo yo el coche que os noto cansados.
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