Cueto Arbás y laguna Arbás

En la cima del Cueto Arbás
Laguna Arbás

29/09/2019
Los reportajes también existen en el tiempo y algunos (en mi caso la mayoría) caen en el olvido quedando confinados en el apartado que nadie visita, al igual que a los viejos en el geriátrico.

Le ocurrió a aquella salida invernal al Cueto Arbás donde pude realizar una ascensión corta y limpia a esa cima que, a pesar de dejarme un muy buen sabor de boca, no volvería a recordar hasta hace unos días.

Buscando lagunas sobre el Iberpix, reparé en la laguna Arbás (que aquel día se ocultaba bajo una espesa capa de nieve), situada a los pies del cueto del mismo nombre y saqué del olvido el reportaje que había hecho en su momento, leyendo un comentario del Caleyeru que me incitaba a repetirla en primavera para ver la explosión de colores de la laguna y sus alrededores. 

La primavera pasó, al igual que el verano, pero las lluvias caídas en los últimos días podían haber dejado una pincelada de color en el paisaje, por lo que decidimos preparar la mochila y partir hacia el Puerto de Leitariegos.

Largo trayecto recorriendo los valles de Omaña, el Puerto de la Magdalena y descendiendo entre los abigarrados bosques de Rioscuro para entrar en un Villablino que duerme la mañana del domingo, antes de comenzar la subida al puerto.

Salida del pueblo (Leitariegos) por pista hasta las inmediaciones de una zona recreativa (mesas y sillas) próxima a las pistas de la estación y que con un poco más de recorrido nos acerca hasta la Laguna de Arbás.

No era primavera, pero el día radiante, las merendera montana y los reflejos en sus aguas, hacían del lugar un espacio para enmarcar en la pared de los recuerdos inolvidables.

El Caleyeru tenía razón: "una montaña preciosa de visitar".



Sales del Puerto de Leitariegos y tienes a la vista el Cueto Arbás.
Puerto de Leitariegos.

Laguna Arbás a los pies del Cueto.
Muchas fotos, había que hacer muchas fotos para captar "El MOMENTAZO" (algo similar al stendhalazo o síndrome de Stendhal, pero referido a un momento)





Continuamos con la ascensión hacia la collada Fanetina
y después a la cima.
Si! ese es el Cueto del Oso.


Joer! menudas vistas!!!!




CIMA!!!!!

El primer (o el último) dos mil de la Cordillera.
El día se deteriora.
Parece que va a llover!!!
Pues déjala que caiga!!!




Panorámica desde la proximidades de la cima del Cueto Arbás (mirando hacia el sur)

Pico Vallines por el Pozo Butrero

En el Pozo Butero

14/09/2019
Día disfrutón el que nos brindó la ascensión al Vallines.

Desde las proximidades de Llánaves de la Reina, nos colamos por el valle de Culebrejas hasta la majada de los Cantos, evitando en lo posible la pista y caminando por la pradera que después de las últimas lluvias parece reverdecer.

Un pequeño refugio (cerrado) y algún corral de ganado en los Cantos (cabecera del Culebrejas) y un sendero apenas perceptible para alcanzar una pista superior. Nosotros continuamos por el camino que asciende junto al arroyo dando vistas al Calar de Junanito, espléndido murallón calizo que cierra por fin el valle hacia el norte.

Dejamos la pista en una forzada curva y seguimos dirección norte hacia el calar, buscando el mejor paso que nos meta de lleno en una cómoda vallada.

Ganamos algo de altura y nos desviamos a nuestra izquierda (bajo los cortados) en busca del Pozo Butrero.

El día amaneció mal, con algo de lluvia en León y unos feos nubarrones sobre la zona del puerto que presagiaban lluvias. Pero el viento despejó las nubes y un poderoso sol ha venido a iluminar la laguna donde cientos de tritones alpinos (yo conté 68 en una rápida pasada) nadaban sobre sus verdosas aguas.

El Vallines, esa cima de estupendas vistas que queda eclipsada a la sombra del Coriscao, nos llama como canto de sirenas y en un arrebato decido alcanzar su cumbre.

Buenas vistas hacia el Coriscao y mejores hacia el grupo de cimas comprendidas entre Peña Prieta y el Espigüete.

Me asomo por la cara noroeste a ver si puedo ver al grupo de montesas que sorprendí durante el ascenso, pero no hay ni rastro de ellas.

Descenso rápido, cómodo y con algo de prisa para acercarnos al plato en el restaurante de Llánaves, que los estómagos comienzan a aullar. 




Iniciando la ruta por el valle de Culebrejas que es probable que tome su nombre por el serpenteo que hace su arroyo, similar al de cualquier culebrilla.
Nos giramos y vemos parte de la Sierra de Orpiñas.
A nuestro frente, al fondo del valle, el punto que hemos de alcanzar para meternos por la vallada que nos conduzca a Pozo Butrero. A la izquierda la cima del Vallines.

Valle de Culebrejas.
Majada de los Cantos.

El Calar de Juanito.
Un pegote de caliza en este mar de pudinga.

La vallada que nos lleva al pozo.
A nuestras espaladas una panorámica que recoge el Calar de Juanito y el Coriscao.

Calar de Juanito
Cabras montesas.

Impresionante el valle que desciende del Vallines. Entre la pudinga y la caliza se deslizaría la lengua de hielo que ha formado este valle.
Pozo Butrero.
Pozo Butero con el Vallines al fondo.
Vistas durante el ascenso al Vallines.

Un buen grupo de montesas se asusta ante mis pasos.
Machos y hembras.
Panorámica hacia el grupo de Peña Prieta - Murcia
Hacia Picos.
La cumbre del Vallines y detrás el Alto de la Quebrantada.

Pozo Butrero desde la cima.
CIMA!!!! del Vallines.

Pozo Butrero.
Tritones alpinos.






Una foto para el recuerdo.

Descendiendo.
Panorámica desde la cima del Vallines.