3/01/2017
Cuantos años de entrenamiento hacen falta para aprender a disparar directamente al corazón???
Joer la frase se las trae!!!!
Podría aplicarla a las sesiones de tiro con arco, cambiando la pelota amarilla por un corazón rojo, sangrante......
Aunque presiento que va más orientada a historias del corazón, hoy la traigo a este report, a colación de la nueva técnica que he empleado para fotografiar aves a muy larga distancia.
El digiscoping, no es nada nuevo. Fotografiar con una cámara digital, la imagen que se forma en el ocular del telescopio. Sencillo teniendo el material apropiado. Y en mi caso lo tengo; el cata sobre el trípode y una compacta que se aboca justo en el ocular del teleobjetivo.
Inconvenientes: Enfoque del tele manual, vibración de todo el conjunto, las serretas que no paran ni un segundo y lo fundamental: mi presbicia.
No se si necesitaré muchos años de entrenamiento. De momento esta primera vez ha dado un resultado horroroso de calidad, pero no en el plano testimonial. He podido fotografiar a las tres serretas medianas que estos días descansan en las marismas de Bengoa y que ayer tarde descubrimos a última hora de la tarde.
La marea bajando, las ha ido separando más. Recorremos el camino de las marismas hasta el observatorio. Y desde ese punto las contemplamos en sus evoluciones mientras pescan.
Con los buches llenos, adecentan sus plumas y se retiran a descansar. Es cuando nosotros notamos el crujir de nuestras tripas y decidimos ir a comer.
Agujas colinegras
Zampullín cuellinegro.
Serretas medianas fotografiadas con la Canon SX60HS
Digiscoping
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