Alcatraces
Inconfundible la silueta del alcatraz: alas estrechas y largas, cuerpo blanco con las puntas de las alas negras.
Sobrevuela la bahía a gran velocidad, sin esfuerzo aparente. La pleamar favorece su acercamiento a la playa de Paignton.
Le seguimos con la mirada, a ritmo trepidante, escudriñando las aguas. De repente se cruza otro alcatraz. Y otro más!!!!
Evolucionan planeando a 20 ó 30 metros sobre la superficie del mar. Vista la presa, se precipitan y sumergen en picado hacia el pez.
Por muy perfecta que sea la entrada, un impacto desde esa altura y con velocidad, resulta un golpe muy violento. Para evitarlo, durante el descenso, en el cuello y los costados se hinchan unas pequeñas bolsas de aire que le permiten amortiguar el impacto del agua.
Si tiene suerte, engullirá la presa y remontará el vuelo.
Los alcatraces corren contra el viento para adquirir la fuerza necesaria para elevarse, aleteando fuertemente e impulsándose con las patas.
Mientras más grande es el ave, mayor es el esfuerzo necesario para despegar, y estas aves de casi cuatro kilos de peso y dos metros de envergadura, lo tienen difícil al tener unas alas muy estrechas.
Las alas del alcatraz -entre 47 y 53 centímetros- están diseñadas para aprovechar las corrientes de aire horizontales (las que generan las olas).
Las aves planeadoras de alta mar describen movimientos espirales contra el viento muy cerca de la superficie, donde las corrientes son más veloces, y dan la impresión de estar flotando en el aire.
Muy diferente al planeo marítimo, es el planeo de tierra, propio de las aves rapaces con alas más anchas, que aprovechan la fuerza de las corrientes ascendentes producto del calentamiento de la tierra.
Apoyados sobre los muros del puerto, seguimos a los alcatraces. Demasiado rápidos para nuestra "bridge", solo conseguimos atrapar imágenes de remontadas y algún que otro planeo.
Unas fotos espectaculares de una ave majestuosa. Enhorabuena y un saludo.
ResponderEliminarHola José, gracias por el comentario.
EliminarDesafortunadamente para estas aves y todas las que se encuentran por las playas de Paignton, ayer por la tarde, después de colocar este reportaje, me bajé a la playa con el kayak y me encontré que sobre el agua flotaba una mancha marrón y todo el agua estaba teñida de marrón.
Hoy por la tarde he vuelto a la playa y continua igual. La gente parece no darle importancia y continua pescando e incitando a sus perros a bañarse. No me lo puedo creer!!!
Saludos.