El "prau les vaques"



El "prau les vaques" se transformó en la laguna de las barnaclas.

Toda la lluvia que ha caído estos días, se esta encargando de trasformar el paisaje.

Recorríamos el camino de Dartington, cuando al llegar a la pradera que da acceso al bosque encontramos que las vacas han sido sustituidas por las barnaclas.

Barnaclas y ánades reales.

Y los colores otoñales que aún no se perciben.



 La laguna de las barnaclas,

que hace unos días era un prado donde pastaban las vacas.

Oddicombe Beach



Torquay, una población grande al norte de Paignton. Nos acercamos hasta ella para ver alguna de sus playas y hacernos una idea de por dónde pasa el "camino costero".

Bajamos a Oddicombe Beach por un camino entre un bosque espeso.

El puerto y la playa se unen por un camino pegado al mar. El "camino costero" se encuentra cortado por un derrumbe de los acantilados.

En lo alto veo escombros. No son de un aprovechado que vio la oportunidad de deshacerse de los cascotes de la reforma de su casa. Son... de una casa con vistas, que se asomó demasiado.




El "cofi" de las 11.
 

En lo alto vemos cascotes.
 
Una casa.....más bien un pedazo de casa.

Los altos riesgos del senderismo inglés (y 2)



Intentaron meterme miedo con lo de conducir por la izquierda.

Pero de que me hablas??? Por la izquierda??? por la derecha??? Aquí, el problema no es de izquierdas o de derechas. Aquí, el problema, es la falta de espacio.

Martín, con su agudeza, me da la respuesta. El volante ni a la derecha, ni a la izquierda. Donde hay que ponerlo es en el centro. Qué razón llevas Martín!!!!! Qué razón llevas!!!!

En España, cuando planeaba una ascensión, era importante ver las reseñas para conocer las dificultades del ascenso.

En Devon, no hay que plantearse esos problemas, ya que, no hay cimas. Pero hay que tener en cuenta la distancia a recorrer desde que abandonemos la carretera principal, hasta el inicio de la excursión.

Las carreteras principales son estrechas. Tanto que, en muchos tramos no pasan dos autocares (no te cuento dos camiones). No hay arcén, no hay cunetas, las paradas del bus están en la propia carretera y la vegetación llega en forma de muro al límite del asfalto.

Cuando abandonamos las vías principales, el carril se reduce a la mitad, existiendo ensanches cada poco para poder orillarse uno de los vehículos.
 
Y recorres millas y millas, por un pasillo de vegetación, sin saber si te vas a dar de morros con otro coche en la siguiente curva, o lo que es peor tragarse a un ciclista.
 
Así, el cuello va notando la rigidez de la tensión, a la vez que te preguntas: Todo esto lo tenemos que volver a pasar a la vuelta??
 
Un volante en el centro, eso es lo que necesitamos, un volante en el centro y.... poder volar!!!!!

 A este por dónde le adelantamos: por la derecha??? por la izquierda???
 

Garceta común



Esbelta, elegante, plumas blancas inmaculadas. Pico negro, al igual que las patas, y calcetines amarillo brillantes.

Ha colonizado recientemente el sur de Inglaterra.

Esta tarde la vimos alimentándose en el mar. La pleamar la obligaba a acercarse.

Hasta un límite. Al final, partió hacia el puerto.






Kingswear



Kingswear junto a Dartmouth son las poblaciones que se asientan en la desembocadura del Dart.

Para llegar a este punto partimos de Coletón, un poblado de cuatro casas. En el camino, antes de unirnos al South West Coast, encontramos dos construcciones muy diferentes. Tan opuestas, que la primera, The Daymark es una torre levantada en tierra, cuya finalidad es la ayuda a la navegación, mientras que la segunda, Brownstone Battery, es una batería de artillería costera, construida al inicio de la Segunda Guerra Mundial, totalmente camuflada con el entorno.

Desde Brownstone Battery, vamos recorriendo una costa llena de acantilados y bosques.

 The Daymark, construcción de 25 metros, levantada en 1.864 con la finalidad de ayuda a la navegación.

 Brownstone Battery, construida a principio de la II Guerra Mundial.







 Entrada a la ría del Dart.


Dartmouth.
Kingswear.

Corneja negra


Tanto en Paignon como en Totnes, las vemos formando grupos muy numerosos con otros córvidos y con gaviotas.

En Totnes recorriendo los campos en busca de gusanos y pequeños insectos. En Paignton, en la playa ampliando  su dieta con moluscos.

Mientras observaba a los ostreros, vi la dificultad que supone para estas aves, extraer un molusco de su caparazón. Cuando encuentran uno, lo pinzan con el pico y van en busca de una oquedad donde encajar la concha y desprender con el pico de un tirón el molusco.

Las cornejas aparentan tener más inteligencia. He podido ver como recogen mejillones entre las algas en la playa. Una vez descubierto, no han dudado en pisar la concha con la pata y desprender el molusco con su potente pico.

He dicho, "tener más inteligencia". Pero bien podría ser fruto de su experiencia, ya que, según he podido leer, se tiene constancia que estas aves llegan a vivir la friolera de 70 años.

Para un animal expuesto a la intemperie desde su nacimiento, parece mucho tiempo.







En vuelo





Llevamos unos días con fuertes ráfagas de viento. El mar, que tantas veces nos ha sorprendido por su tranquilidad, se encuentra encrespado, con olas que deciden viajar más allá de las playas y escalar los muros del paseo.

Volvemos a Redcliff, los acantilados rojos que tenemos al lado de casa. Los vientos se estrellan contra ellos y desestabilizan a la aves que se atreven a franquearlos.

Por eso, nos colocamos a su vera, cámara en mano, para ver su paso y poder hacerles alguna foto.

Se sienten protegidas al abrigo de los acantilados, pero en un momento deciden remontar el vuelo y cruzar a la zona desprotegida. A sabiendas del impacto que recibirán sobre sus alas.

Porque muchas veces es necesario abrir las alas y echarse a volar.





Man Sands


No fue suficiente la mojadura del viernes!!!!

Volvemos a insistir por la zona de Sharkham Point. Esta vez rumbo al sur, a la playa de Man, donde hemos descubierto una laguna muy próxima a la playa.

El día no prometía mucho: nubes y fuerte viento. Pero la temperatura era agradable, lo que nos anima.

Ha sido llegar hasta Man Sands y comenzar a caer las primeras gotas. El chaparrón no se hizo esperar.

Hacía mucho tiempo que no soportábamos un aguacero tan impresionante. Por momentos el temporal se acrecentaba y veíamos avanzar cortinas de agua, que el viento nos lanzaba como un tren de lavado. El agua corría por el chubasquero, empapaba el pantalón y finalizaba su recorrido encharcando las botas.

A los cinco minutos, mi andar era como el de un zombi. El pantalón pesaba y las botas chapoteaban.

Me acerco a Cruz para preguntarle cómo va y me comenta que siente correr el agua por su espalda.

QUE BUENA VIDA LLEVAMOS!!!!!!!



Berry Head.
 


Man Sands y la pequeña laguna donde hemos visto reales, pollas de agua y una garza real.
 
Recogemos con rapidez.